El gen TYR (tirosinasa) es una pieza clave en el proceso de producción de melanina. Está directamente relacionado con la capacidad del cuerpo para producir pigmento en la piel, el cabello y los ojos.
Cuando alguien hereda dos copias variantes de este gen (por ejemplo, el alelo TYR:rs1042602 AA), la capacidad para producir melanina se ve reducida. Esto no causa vitiligo directamente, pero sí influye en la forma en que aparece, progresa y responde al tratamiento.
Una persona con menor actividad de tirosinasa tendrá una piel más clara por naturaleza y será más vulnerable a la pérdida de pigmento. Esto se vuelve evidente en el contexto del vitiligo, donde las manchas aparecen con mayor contraste.
Conocer tu genotipo TYR puede ayudar a personalizar el tratamiento: desde la frecuencia de la fototerapia hasta el tipo de crema o el refuerzo antioxidante necesario.
Más allá de los genes, lo importante es lo que haces con la información. Esta es una oportunidad para actuar de forma proactiva.